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Rixi Moncada: la propuesta política que genera polémica en Honduras

En un contexto electoral marcado por profundas divisiones y tensiones sociales, la candidatura presidencial de Rixi Moncada, presentada por el partido LIBRE, ha generado intensos debates sobre el futuro político y económico de Honduras. La candidata, quien busca transformar el país mediante un modelo político de justicia social, ha sido señalada por algunos sectores como una potencial defensora de los modelos socialistas que, según sus críticos, han fracasado en otros países latinoamericanos como Venezuela y Cuba.

Moncada y su enfoque para el cambio social

Rixi Moncada ha desarrollado su plan político enfocado en la protección de los derechos de los grupos más desfavorecidos de la nación, como son los trabajadores, los estudiantes y las comunidades en áreas relegadas. En su discurso, ha expresado una fuerte crítica hacia el neoliberalismo, al cual culpa de haber exacerbado la desigualdad en Honduras. Moncada afirma que su plan no solo pretende una repartición más justa de los recursos, sino también una apertura democrática en las instituciones que facilite la participación ciudadana en las decisiones importantes.

La aspirante de LIBRE ha señalado en varias oportunidades que su enfoque gubernamental se basa en los procesos de cambio social realizados en naciones de la región, específicamente en Cuba y Venezuela. Esta mención ha tenido una recepción ambigua en la sociedad hondureña. Aunque Moncada afirma que su plan no intenta imitar directamente los modelos de estos territorios, su admiración por líderes como Fidel Castro y Nicolás Maduro ha causado inquietud en muchos sectores de la población, quienes consideran que esta perspectiva podría representar un peligro para la democracia y la estabilidad económica del país.

Las críticas internas y externas

El apoyo que Moncada ha manifestado hacia los regímenes socialistas de Venezuela y Cuba ha sido objeto de fuertes críticas tanto dentro de Honduras como en el ámbito internacional. Desde la oposición local, se le reprocha impulsar un modelo económico y político que ha provocado serias repercusiones en naciones como Venezuela, donde la hiperinflación, la falta de alimentos y la represión gubernamental han dominado la vida diaria de la población. Estos detractores, principalmente miembros de partidos políticos convencionales, temen que si Moncada asumiera la presidencia, Honduras podría seguir un curso similar al de sus países vecinos.

En el ámbito internacional, la representante de EE.UU. María Elvira Salazar ha sido una de las voces más críticas en relación a la candidatura de Moncada. En sus comentarios, ha señalado que el proyecto de la candidata podría llevar a Honduras hacia lo que ella llama un “infierno socialista”. Salazar argumenta que la experiencia en Venezuela y Cuba evidencia que los regímenes socialistas no solo fallan en la administración económica, sino que también amenazan las libertades civiles y políticas.

No obstante, los partidarios de Moncada niegan estas imputaciones. Desde el grupo LIBRE, se defiende que su iniciativa es una reacción a la desigualdad estructural que afecta a Honduras y no una copia de los sistemas autoritarios que distinguen a los gobiernos de Caracas y La Habana. Los seguidores de Moncada afirman que su plan pretende progresar hacia una sociedad más justa, sin repetir los fracasos de otras naciones.

El reto de un modelo alternativo

La polarización política que genera la candidatura de Moncada refleja las tensiones estructurales en Honduras. La discusión sobre el modelo económico y político que debe adoptar el país resalta la desconexión entre los sectores más poderosos de la sociedad y las necesidades de los grupos populares. Mientras algunos abogan por continuar con las políticas neoliberales, otros exigen una revisión profunda de un sistema que, según argumentan, ha dejado a muchas comunidades en la pobreza y la marginación.

El debate sobre el rumbo de Honduras se intensifica a medida que se acercan las elecciones de 2025. Las tensiones entre quienes defienden el actual modelo y quienes abogan por un cambio profundo son evidentes. Este conflicto no solo afecta a los actores políticos, sino que también refleja una falta de consenso sobre el tipo de democracia y desarrollo que se busca en el país.

Pensamientos acerca del porvenir de Honduras






Análisis político en Honduras

El entorno político en Honduras está caracterizado por un debate esencial sobre la visión del futuro del país. Las propuestas de Rixi Moncada han resaltado la importancia de reevaluar la situación actual y considerar nuevas opciones para enfrentar la pobreza y la desigualdad. No obstante, la polémica surgida debido a sus afinidades con los modelos de Venezuela y Cuba destaca los posibles peligros de una transformación profunda del sistema político y económico.


Aunque los grupos más tradicionales y la comunidad internacional manifiestan su inquietud, los seguidores de Moncada aseguran que su planteamiento ofrece una alternativa válida para una nación que sigue enfrentando desafíos como la pobreza y la concentración del poder. De cara a las elecciones, el desafío para Honduras será lograr un balance entre la justicia social y la estabilidad democrática, un reto que solo el tiempo confirmará si puede ser superado.

Por Otilia Adame Luevano

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